Vigila la palabra Hermano!

!VIGILA LA PALABRA HERMANO!

Vigila la palabra hermano, ese don con que la naturaleza o el G:.A:.D:.U:. nos ha dotado a ti, a mi y a millones de seres humanos, no es poca cosa, la palabra lleva en si la semilla de la destrucción o el progreso y civilización de la raza humana, es espada de doble filo, cuando se usa, tengo para mi que hay que cuidar bien, el emplearla con cautela, como si de una bomba con exquisita sensibilidad para estallar se tratara, la historia de la humanidad reboza de miles de ejemplos de guerras, conquistas, progresos y retrasos por haber usado inadecuadamente la palabra.
Cuantas desazones, desilusiones, parejas y amigos que terminan, empresas que fracasan , brechas generacionales que se abren , muros que aislan en lugar de puentes que comunican tan solo por usar la palabra equivocadamente.
Cuando se habla considero se debe procurar llevar verdad en lo que se dice, nada prospera en la mentira, ni la amistad, ni el amor filial o fraterno crecen, cuando hay mentira hay ignorancia, desconfianza, y el verdadero conocimiento de las cosas y de los seres no crece en el erial de la mentira.
Te invito a considerar el hablar con respeto al prójimo, sin injuriarlo o denostarlo; habría que recordar aquel proverbio de sabiduría popular que dice :”Quien ofende escribe en arena, quien es ofendido escribe en acero”, la venganza se desarrolla y alimenta de la injuria.
Considero que conviene llevar esperanza y optimismo en lo que se dice hermano, tengo para mi que el prójimo tiende por intuición a acercarse con sus iguales, demostremos optimismo y esperanza, y otros con las mismas características se unirán y los que no lo sean, porque no tienen esperanza y son pesimistas, al menos recibirán con nuestra palabra el bálsamo que alivie sus penas.
Que nuestra palabra sea contrato no escrito de lo que prometemos, nunca faltar a la palabra, pues al hacerlo se siembra desconfianza y desilusión, y aquel que es defraudado no solo no volverá a creer en ti o en mi, sino que anidara en su alma rencor que extendido a otros forma la misantropía.
Hermano, cuando usemos la palabra , cuidemos bien de no romper el secreto que se nos ha confiado , al romper el secreto, rompemos la confianza del prójimo , rompemos el pundonor de nuestro buen nombre, bien decía Samuel Smiles: “Una persona ya es alguien, cuando se sabe que se puede confiar en el”.

La palabra puede ser usada como herramienta de exploración, preguntemos hermano, todo lo que no sepamos, todo lo que dudemos, aprendamos también a expresar nuestras mejores emociones y sentimientos, no vaya a ser que terminemos como aquel que en una canción de Atahualpa Yupanki se expresaba asi: “Cuando el amor me hizo señas/todo entero me encendí/ y a fuerza de ser callado/callado me consumí/Le tengo rabia al silencio/ por lo mucho que perdí/ que no se quede callado/ quien quiera vivir feliz/
Pero la palabra exige un camino de dos vías, no basta hablar sino escuchar, escuchar une, escuchar favorece la sabiduría, escuchar nos permite visitar mundos desconocidos y dimensiones diferentes a los que desconocemos, escuchar nos permite compartir las bellezas de la vida.
Cuando sea otro el que haga uso de la palabra, callemos, callemos profundamente, seamos esponja, recipiente vacío , para que recibamos con plenitud y sin prejuicios lo que quieren transmitirnos, bien decía Sócrates: “Habla , para que te conozca”.
Pienso que no estamos obligado a pensar o creer lo mismo, pero si estamos obligados a escuchar lo que dicen y piensan los otros, es la forma de pagar el derecho que se nos otorgo para emplear tu la palabra.
De la palabra escuchada habrá que discriminar la verdad, comprometernos a comprender las razones y los motivos, porque de ahí se alimenta la tolerancia, que en nuestra persona se detengan los rumores y malos infundios y guardemos como secreto de tumba lo que se nos ha confiado.
En nuestra Augusta Institución el uso de la palabra ocupa un lugar muy importante, por esa razón se hacen los trazados, por esa razón se enaltecen la artes liberales dentro de las cuales están la retórica y la gramática, por el uso de la palabra nos trasmiten su luz nuestros hermanos y nosotros mismos hacemos lo propio, y por eso también cada vez que de una tenida salimos, estamos y somos mejor que la vez anterior.
Por todo lo anterior, y por muchas mas razones, que hoy por hoy en mis reflexiones seguramente no tome en cuenta, !Vigila la palabra Hermano!.
Es cuanto.