Se lee en nuestra Liturgia de primer grado (1): “¿Que entendéis por masonería Q:.H: primer Vigilante? El estudio de la filosofía y en particular de la moral para conocer y practicar la virtud”.
Ante esta respuesta surge una pregunta lógica ¿Cómo podemos practicar la virtud sin conocerla? Me parece un desatino mencionar esa respuesta al V:.M:. en cada tenida sin conocer al menos superficialmente que es una virtud y en consecuencia practicarla.
De acuerdo con el diccionario (2) La virtud es una actividad o fuerza de las cosas para producir o causar sus efectos, otro significado es el de poder o potestad de obrar, se dice también que es integridad de ánimo y bondad de vida y, finalmente se describe como el hábito del alma de proceder.
Otra fuente (3) la describe como hábito bueno, cualidad difícilmente removible que perfecciona al ser o a la operación.
Como sinónimos se manejan las palabras de integridad, honestidad y probidad y como antónimos el de vicio, vileza, bajeza, desaliento y cobardía (4).
La palabra virtud viene de virtus que se deriva de la palabra areté y significa en primer lugar una potencia o una excelencia (5).
En palabras de Compte Sponville:”Es una fuerza que actúa o que puede actuar, así la virtud de una planta o medicamento es sanar; la de un cuchillo cortar y la de un humano la voluntad de actuar humanamente” (6).
Continua diciendo Compte: “En sentido general la virtud del cuchillo no es moral, un excelente cuchillo en manos de un malvado sigue siendo un excelente cuchillo” (6).
“Las llamadas virtudes morales logran que un hombre parezca mas humano o excelente que otro” (6).
Pero, ¿Qué se entiende por excelencia del Hombre?
Para Aristóteles era lo que lo distinguía de los animales, es decir la vida racional (6) y dice Compte:” Es una manera de ser, pero adquirida y durable: Es lo que somos o hemos llegado a ser gracias a nuestro esfuerzo” (6). “Es el esfuerzo para actuar bien y el bien se define por ese esfuerzo mismo” (5). “…Es la realización e un individuo que se vuelve para si mismo u propia regla al no prohibirse sino lo que juzga indigno de lo que el es o quiere ser” (5).
Aristóteles definía la virtud como el justo medio (o medianía) entre dos extremos opuestos (uno por exceso y otro por defecto) así de esta manera la valentía se sitúa entre la temeridad y la cobardía. El temerario asume riesgos desconsiderados (peca por exceso) y el cobarde no asume los suficientes (peca por defecto) (5).
“Toda virtud es una cumbre entre dos vicios. Un perfil de alturas entre dos abismos” (5) (6).
Pero, ¿Quién puede vivir siempre en las cumbres? La reflexión sobre las virtudes no nos torna virtuosos o en todo caso no basta para ello (6).
“Pensar las virtudes es medir la distancia que nos separa de ellas, pensar sus
Excelencias es pensar nuestra insuficiencia o nuestra miseria dice Compte (6) y “la virtud se enseña mas por el ejemplo que por los libros”.
Se dice que la virtud puede ser perfecta o imperfecta (3). Esta última es aquella que no cumple con alguna de las condiciones de la virtud perfecta, también se llama virtud apetitiva porque no esta orientada al fin último del hombre (3).
Para que una virtud sea perfecta debe tener las siguientes características (3):
1.- Abarcar todo el ámbito de lo virtuoso (la virtud no admite grados o se es o no se es).
2.- Se orienta al fin último absoluto.
3.- Esta en conexión con las demás virtudes, especialmente la prudencia.
4.-Es voluntaria y unida a la recta razón.
5.-Confiere el buen uso.
Las virtudes se clasifican en teologales (caridad, fe y esperanza) y cardinales (prudencia, justicia, fortaleza y templanza) (3).
Sin embargo también se mencionan: cortesía, fidelidad, coraje, generosidad, compasión, misericordia, gratitud, humildad, tolerancia, dulzura, buena f e, humor y amor (6)
Hasta aquí lo dicho por otros, hagamos una sinopsis:
1.- Las virtudes son adquiridas, no se nace con ellas.
2.-Se adquieren por el ejemplo y voluntariamente.
3.-Se ejecutan por hábito.
4.-No hay graduación en ninguna de las virtudes, o se es o no se es.
5.- Se rigen por la prudencia y la recta razón.
6.- Nos distinguen de los animales y nos da blasón de humanos entre los humanos.
Considero conveniente en futuros trazados hablar de todas y cada una de las virtudes, para conocerlas, para practicarlas, solo así surgirá el Mason ideal que la masonería propone.
Es cuanto.
Bibliografía:
- Autor desconocido: Liturgia del grado de aprendiz. Editorial Herbasa.
- Raluy Poudevida, Antonio: Diccionario Porrua de la Lengua Española. Editorial Porrua. 2005. México.D.F.
- García Alonso, luz; Saiz Núñez, María Begoña: Diccionario de valores, virtudes y vicios. Ed. Trillas. 2007. México. D.F.
- Clave, Margara: Diccionario de sinónimos y antónimos. Editorial Concepto S.A.: 1979.
- Compte-Sponville Andre: Diccionario filosófico. Editorial Paidos. 2005.
- Compte-Sponville Andre: Pequeño tratado de las grandes virtudes. Editorial Andrés Bello 1997. Santiago de Chile, Chile.
No hay comentarios:
Publicar un comentario